Esta imagen muestra cómo el cometa objetivo de la misión Rosetta comienza a desarrollar una cola. Este es un buen augurio para la nave espacial de la Agencia Espacial Europea, que está en camino para estudiar el cometa 67P/Churyumov-Gerasimenko a finales de este año con el fin de aprender más acerca de los orígenes del sistema solar.
"Está comenzando a parecerse a un cometa real", declaró Holger Sierks, investigador principal de OSIRIS (Optical, Spectroscopic and Infrared Remote Imaging System)
"Es difícil de creer que sólo en unos pocos meses a partir de ahora, Rosetta estará muy dentro de esta nube de polvo y en ruta hacia el origen de la actividad del cometa", agregó Sierks , quien trabaja en el Instituto Max Planck para la Investigación del Sistema Solar en Alemania.
La imagen es una de una serie tomada durante seis semanas , entre el 27 de marzo y 4 de mayo, cuando la nave se situó a menos de dos millones de kilómetros del cometa.
El cometa está ahora alrededor de cuatro veces más lejos del Sol que la Tierra. Incluso desde lejos, el calor del sol está calentando el hielo del cometa, provocando la formación de polvo y vapor. Esta coma se convertirá en una larga cola cuando el cometa llegue aún más cerca del Sol.
Rosetta acompañará al cometa en su acercamiento al Sol, cuyo máximo tendrá lugar en agosto de 2015, cuando esté entre los órbitas de Marte y de la Tierra. Hasta el momento, los 11 instrumentos de la nave parecen estar en excelente estado de salud, según la ESA. La nave espacial comenzará las actividades de inserción en órbita a finales de este mes , y enviará su módulo de aterrizaje Philae en noviembre.
"Tenemos un desafío de tres meses antes de que naveguemos cerca del cometa, pero después de un viaje de 10 años es genial ser capaz de decir que nuestra nave espacial está lista para llevar a cabo la ciencia única que nos espera en 67P/CG", declaró Fred Jansen, director de la misión Rosetta de la ESA.